Nosotros los jóvenes cristianos tenemos la capacidad de hacer la diferencia, de revolucionar, de impactar de crear una nueva visión diferente ante el mundo. Ayudando así a mejorar una problemática social en que vivimos, y en donde se encuentra sumergida nuestra sociedad, para ello comenzaremos desde nuestra ciudad Florencia y mostraremos al mundo entero que si hay una solución a sus problemas, dándoles a conocer el evangelio, ya que para eso Dios nos ha escogido y llamado a nosotros lo jóvenes. Y esto solo se puede lograr con un pensamiento de un joven revolucionario fundamentado en Cristo.
Hoy habia 2 visitantes (7 clics a subpáginas) ¡Aqui en esta página!